Ilusión y
realidad batallando,
espejos oscuros,
turbios,
claridad resbaladiza,
tiempo indescriptible
cuestionándome:
¿Quizás estoy
demasiado joven o
mi juventud
muy gastada?
Las galerías humanas
me hacen errante
tras la ruta
del existir,
y allá, en el último
rincón
aprendo a no
ver el sol del alma,
solo percibo
su calor,
su celeste
presencia.
Me conformo
con la inquietud de mi tiempo
aunque no lo
tenga.
Auscultado mi cuerpo
me encuentro
solitario,
mi esencia
persigue la dualidad,
a priori,
recorro lo etéreo
de la belleza,
¡Y apareces!
como polvo de
estrellas diciéndome:
materializa
esa pasión
en lo profundo
de mi cuerpo,
y mañana te observaras
en el espejo
de mis entrañas.
Pero escapé,
percibí que
todo lo tenía,
hasta la
muerte,
porque tu
cuerpo no palpitaba
sensibilizado
y no me preguntaste:
¿Por qué morir
ahora?
#Poesía
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