lunes, 11 de febrero de 2019

La inspiración suspiró susurrándole a la hoja en blanco tú nombre.

¿Por dónde empezar cuándo la belleza tiene tú nombre?
La elegancia a flor de piel se confunde
con el rojo de tus labios,
la mirada de encanto
juega con tu cabello liso,
esa mirada que encierra paisajes,
melodías, ensueños,
esos labios que dibujan sabor a vida,
a amaneceres, a sonrisas del alma,
ese cabello que lleva al viento,
que tiene mar, ríos,
esa piel morena que tiene aguas cristalinas,
que tiene miel, canela,
esa ternura en los ojos de luz de aurora boreal.
Y sonríes y la tierra tiembla,
y miras al cielo y la lluvia moja tu belleza,
y cierras los ojos y los sueños te acarician las mejillas,
y duermes y la noche besa tus labios.
Los colores son ilusión a tu lado,
basta mirarte para que ellos tomen vida,
el aroma del café es poco a lo que tu sonrisa invita,
y sobran palabras para la magia de tu vida,
ellas, las palabras, enmudecen al llegar a ti.

El café suspira en esta tarde de inspiración,
sabe que en tus días buenos y malos,
la esencia de la vida habita en tu interior,
las flores saben de tu universo,
la poesía le coquetea a tu mirada de galaxias;
y en esta tarde, la inspiración suspiró
susurrándole a la hoja en blanco tú nombre. 

#Poesía

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