cómplice de mis
largas esperas,
ahora me dibujas su
rostro,
ahora traes a mí
vista los ojos oscuros y claros
que ella se niega a
compartir,
humo que silencioso
y cautivo trasciende
sobre todo su
cuerpo,
sobre todo su
mundo,
sobre su existir de
diosa,
humo cómplice de
sus más preciados sueños
y que ahora
envuelves en mis palabras
para que también se
mezclen
con las auroras que
ella observa,
con todos los
eclipses que se niega a compartir;
basta humo,
tan solo deseo que
ella
desvanezca toda su
ilusión
en mis ideales,
tan solo humo
mézclate con sus sueños,
humo idiota, humo,
humo de poeta…
asfixia con mi
locura y mis anhelos
su cama de rosas.
#Poesía
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