Ojos de
acantilado,
arrecifes de locura,
cabello de profundidades,
curvas de mar,
olas de tormenta.
Allá, en sus manos,
una caricia persigue el éter
y se imagina el reloj
sin tiempo,
mientras el hoy,
quema mi garganta...
siento sus labios
y me muerde
la impaciencia.
arrecifes de locura,
cabello de profundidades,
curvas de mar,
olas de tormenta.
Allá, en sus manos,
una caricia persigue el éter
y se imagina el reloj
sin tiempo,
mientras el hoy,
quema mi garganta...
siento sus labios
y me muerde
la impaciencia.
#Poesía
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