bosques tiernos y extraños,
ríos torrenciales, lagunas profundas,
flor silvestre y felina,
caricias huracanadas, besos abismales,
solo selva mujer.
Orquídea y manos llenas de pasión,
verdes ocasos de satisfacción,
sin parapetos tremulantes
y con voz de tambor.
En sus piernas los eucaliptos,
en su cintura las fresas,
con su cabello sabor a adicción,
sus caderas de hoguera y ardor.
Desnuda piel nocturna
sabes a selva,
sabes a mujer,
selva mujer.
No hay comentarios.:
Publicar un comentario